martes, 12 de enero de 2010

La costa del Algarve. Sagres y El Cabo de San Vicente

En el extremo suroeste de Europa llegamos a Sagres, enclavado en el Parque Natural del Suroeste Alentejano y Costa Vicentina. Una freguesía de Vila do Obispo con servicios poco sofisticados y un ambiente de vida sencilla, famosa por su escuela de naútica que el Infante de Sagres instauró en el siglo XV en la que se formaron los grandes navegantes. Con playas impresionantes casi desiertas como da Mareta o do Tonel que se encuentran entre acantilados frente a la inmensidad del Atlántico. De obligación en Sagres es beber la cerveza del mismo nombre.

De su brillante pasado quedan los restos de su fortaleza mandada a construir por el infante en el siglo XV con fines defensivos. Sufrió diferentes reconstrucciones a causa de los ataques del pirata Francis Drake y el terremoto de Lisboa. Destacable en su interior es la iglesia de Nossa Senhora de Graçia XVI y la famosa Rosa dos Ventos descubierta en 1928. Una figura geométrica redonda de piedra, construida en el suelo con 43 metros de diámetro que se cree se remonta al siglo XVI. Representa una estrella simbolizando los rumbos. Desde la fortaleza se puede observar el Cabo de San Vicente y el espectáculo maravilloso de la puesta de sol sobre el Atlántico.

El cabo de San Vicente es un accidente geográfico conocido en tiempos romanos como Promontorium Sacrum, lugar dedicado al Dios Saturno. En sus aguas tuvo lugar la batalla del mismo nombre el 14 de febrero de 1797, que enfrentó a España y a Inglaterra en el marco de las guerras revolucionarias francesas. Según la leyenda cristiana aquí estuvieron los restos de San Vicente Mártir durante dos siglos hasta que fue conducido a Lisboa en 1173.
Cada día, en este entorno de quietud rajado tan sólo por el batir del mar en los majestuosos acantilados, numerosas personas se dirigen para ver un atardecer único.

domingo, 10 de enero de 2010

La costa del Algarve. Alvor

Con una buena dosis de historia a consecuencia de nuestra visita en Niebla, continuamos por la autopista del Quinto Centenario cruzando el río Tinto y más tarde el Odiel para llegar a la frontera con Portugal cruzando el Puente internacional del Guadiana, desde el que se observa el estuario que forma la impresionante desembocadura en el golfo de Cádiz del río Guadiana. Cruzamos la frontera con Portugal y nos dirigimos sin demora a la ciudad de Alvor.
En 1249 los cristianos conquistan el Algarve tras cinco siglos de influencia islámica (siglo VIII al siglo XIII) proclamandose Alfonso III rey de Portugal y el Algarve. En 1267 el Tratado de Badajoz establecía la frontera entre Portugal y Castilla en el que se reconocía la integración del Reino del Algarve en ela Corona de Portugal. En 1910 con la proclamación de la república de Portugal el reino del Algarve dejó de existir.
Alvor, que se ubica junto a la ría del mismo nombre, es un popular destino de vacaciones de Portimao y se diferencia de la ciudad en que está poco desarrollado. En temporada de verano multiplica su población y goza de una alegre vida nocturna. De obligada mención es la gran amabilidad de la gente.


La iglesia Matriz de San Salvador, fue edificada en el siglo XVI y reconstruída en el siglo XVIII. La puerta lateral es de estilo manuelino como el destacable pórtico principal profusamente labrado. Anexa a la iglesia la sacristía es un antiguo morabito árabe. Las ruinas de un castillo y los morabitos de San pedro y San Juan, dedicados en la actualidad al culto cristiano son testimonios arquitectónicos de la civilización árabe. Alvor también cuenta con dos pequeñas iglesias: la de la Misericordia en el centro y en los Montes de Alvor la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción.

La ría de Alvor es un sistema lagunar costero que está considerada una de las zonas húmedas más importantes del Algarve. Las dos lagunas de arena que forman las playas de Alvor y Meia Praia la protegen del mar. Se conserva una gran belleza paisajística y ecológica en su interior por ser lugar de paso para diferentes especies de aves migratorias.
Paseamos un buen rato por los miradores que recorren gran parte de los acantilados y pudimos observar toda la línea costera, así como los contrastes entre las playas rocosas de frías aguas y altos acantilados con extensiones de arena fina como la conocida praia da Rocha.

viernes, 8 de enero de 2010

Niebla (Huelva)

Emprendimos la marcha, como ya va siendo costumbre, a una hora muy tardía en relación a lo previsto el día anterior. Y es que los imponderables de última hora, como comprar el nuevo libro de Saramago, dificultaron que todo fuese según lo acordado. Ya en camino por la autovía del Quinto Centenario y con destino en el algarve portugués, hicimos escala en Niebla. La ciudad, cuya antigüedad se remonta hasta los comienzos de la Edad del Hierro, es declarada en 1892 Conjunto Monumental Histórico-Artístico. Con una vasta historia, presenta un importante patrimonio heredado de diversa culturas pero que llega al siglo actual muy deteriorado.

Construido en el periodo islámico accedimos por la Puerta del Socorro al impresionante recinto amurallado que rodea la ciudad y que aparece superpuesto sobre otros recintos anteriores o aprovechando algunas de sus partes.
Las murallas tienen un perímetro de 2 km. aproximadamente, horadadas por cinco puertas: de Sevilla, del Socorro, del Agua, del Embarcadero y del Buey. En torno a esta última se cuenta que durante el sitio de Niebla por las tropas de Alfonso X, Aben-Mafot, último rey de Niebla tras varios meses de asedio y escaseando los víveres dentro de la ciudad, hizo salir por dicha puerta un buey para hacer creer a las tropas que aún contaban con gran provisión de alimentos.

Inmediatamente nos encontramos con la iglesia de San Martín con una forma típica musulmana, que ha sufrido numerosas transformaciones y ha sido utilizada con motivos religiosas por las diferentes creencias que han vivido en la ciudad. Fue mezquita menor, más tarde sinagoga y finalmente iglesia cristiana. Nos llamó poderosamente el estado que presenta en la actualidad ya que brutalmente separado en dos para facilitar el tráfico rodado, conserva el ábside gótico-mudéjar del siglo XV y la portada a los pies de la nave central. Anexa a la iglesia la Capilla del Señor dela Columna alberga una imagen del XIV o XV.

La iglesia de Santa María de la Granada que fue mezquita mayor es el resultado de la superposición de edificios de épocas distintas. Conserva el patio para las abluciones, el mihrab o el alminar que tras la reconquista cristiana se reforzó para soportar el peso de las campanas. De la época visigoda conserva una tabla ornamental y una silla episcopal de piedra. Presenta un presbiterio gótico de bóvedas ojivales estrelladas y un ábside gótico-mudéjar con bóveda estrellada. El patio está rodeado por galerías con arcos de herradura de distintos formatos y al frente quedan tres arcos, el central lobulado y los laterales ciegos.

La construcción del Alcázar de los Guzmán, que ha sufrido grandes reformas por parte de los diferentes ocupantes, comienza en 1402 cuando Enrique Guzmán manda derribar el Alcázar Viejo, dejando la parte más interesante de los árabes y reconstruyendo la Torre del Homenaje gravemente afectada por el terremoto de Lisboa del año 1755.
Muy próximo a la iglesia de Santa María se encuentra el antiguo hospital de Nuestra Señora de los Ángeles. A pesar de los grandes cambios sufridos conserva una capilla ojival de su primera construcción fechada en el siglo XVI. Lo más destacable de la fachada es la puerta gótico-isabelina del XV, sobre la que se contruyó una espadaña barroca con un mosaico de azulejos del XVIII en el que se representa una imagen de la Virgen de los Ángeles.
El puente romano sobre el río Tinto a la entrada de la población conserva elementos romanos todavía visibles como los arcos de medio punto.
Pendiente queda una nueva visita para entrar en el castillo y hacer el sendero que transcurre junto al río.